El Instituto de Procesos Sostenibles de la UVa recibe un proyecto Marie Curie para obtener precursores de biocombustibles o materias primas para la industria petroquímica
El Instituto de Procesos Sostenibles de la Universidad de Valladolid ha recibido un proyecto Marie Curie, con el que pretende desarrollar una plataforma de biorrefinería para obtener precursores de biocombustibles o materias primas destinadas a la industria petroquímica, y todo ello a partir de residuos procedentes fundamentalmente de la poda de bosques.
El proyecto Syn2Value "Bioconversión de gas de síntesis en compuestos carboxilados de cadena media en fase gaseosa en biorreactores de alta transferencia con extracción de producto in situ" estará dirigido por Raúl Muñoz y será llevado a cabo por el investigador Rodolfo Palomo. En estos momentos, este joven se encuentra desarrollando sus investigaciones posdoctorales en la universidad alemana de Tubingen, pero a principios de 2024 regresará a la Universidad de Valladolid con el fin de iniciar este ambicioso proyecto, bajo la supervisión de Raúl Muñoz, con estancias en Wageningen University & Research y SME Greene.
El proyecto va en la línea de las investigaciones que se están desarrollando en el instituto de la UVa con microorganismos, procesos biotecnológicos de valorización de residuos para la bioeconomía. Y además va en consonancia con el impulso que ese está dando para la transición a las energías renovables, para descarbonizar la economía de la Unión Europea y consolidar el modelo circular de economía. Y para ello se requiere el desarrollo de rutas alternativas y sostenibles para la producción de combustibles, productos químicos e intermedios.
El proyecto, según explica Raúl Muñoz, sentará las bases de una nueva generación de bioprocesos rentables y sostenibles que contribuirán a cumplir el objetivo del Green Deal de hacer de Europa la primera región climáticamente neutra para 2050, manteniendo la competitividad económica de su industria química en el mundo.
Un proyecto ambicioso
En el proyecto se tratan los residuos no biodegradables con un paso previo termoquímico para transformarlo en gas de síntesis y, posteriormente, en compuestos carboxilados, precursores de biocombustibles o materias primas para la industria química (petroquímica). Estos residuos proceden fundamentalmente de la poda de bosques, de madera. Para esta transformación se utiliza una biotecnología basada en microorganismos anaerobios, que son capaces de transformar el monóxido de carbono, dióxido de carbono e hidrógeno, procedentes de los residuos, que son convertidos en etanol o ácito acético y, posteriormente en otros compuestos.
El proyecto se va a llevar a cabo mayoritariamente en el Instituto de Procesos Sostenibles, aunque la optimización de los microorganismos se desarrollará en una estancia en la Universidad de Wageningen (Países Bajos), mientras que su validación se hará en la empresa española Greene, con objeto de comprobar si ese gas puede ser viable económicamente en el ámbito industrial (biocombustibles o productos para la industria química).
