Los ‘Empresarios del Año’ de la UVa destacan la importancia del trabajador para avanzar y crecer como empresa
La Facultad de Comercio de la Universidad de Valladolid ha celebrado este jueves la tradicional reunión de los ganadores del ‘Certamen Empresario del año’, un encuentro que ha servido, principalmente, para subrayar el valor del tejido empresarial local con ejemplos de buenas prácticas que aúnan tradición e innovación.
Así, los galardonados compartieron sus experiencias al tiempo que destacaron la relevancia de contar con un buen equipo humano que acompañe en el devenir de la mercantil, un capital “fundamental” para mantener tanto la actividad como el trabajo, según ha reconocido el director ejecutivo de Patatas Meléndez, Javier Meléndez, Premio Especial de la presente edición.
Es más, continuó el ejecutivo, un buen clima social “es básico” dentro de la empresa, que debe hacer todo lo posible para que su filosofía “implique” a todo el personal, para que se sientan “orgullosos” de pertenecer a ella. “Un equipo contento, es un equipo invencible”, ha significado.
Meléndez declaró que un empleado que hable bien de la empresa es también un buen termómetro para medir el valor de la misma, junto con la satisfacción del cliente y, en su caso también, la del agricultor. En la actualidad, Patatas Meléndez cuenta con 500 trabajadores directos y otro medio millar de agricultores indirectos.
En esta línea se manifestó Mario Soriano (Eh Voilà), ganador en el apartado de Hostelería, para quien un buen equipo ayuda a avanzar además de que, desde su perspectiva, representan los clientes internos de cualquier mercantil y son “primordiales”, idea que llevó un paso más la ganadora del Empresario Joven, Elena Martín Guerra, al definir al capital humano como “familia”.
Por su parte, Alejandro García Rico (Recuperaciones Íscar), Mercurio en Sector Servicios, y tercera generación de esta empresa con sede en Pedrajas de San Esteban, reconoció sentirse “orgulloso” de tener empleados que empezaron a trabajar antes de que él mismo naciera.
DIFICULTADES
El camino del empresario no está exento de dificultades que impiden avanzar en la dirección correcta o planeada desde un principio. Sin embargo, “si uno cree en lo que hace no habrá problema”, afirmó José Gómez (RKV Irrigación), ganador en Industria, un veterano empresario que a lo largo de su trayectoria ha superado crisis económicas y varias intervenciones quirúrgicas.
Sin embargo, las dificultades también pueden aparecer por la responsabilidad de ser herederos y “demostrar que va a seguir funcionando”, como apuntó García Rico, o por el hecho de realizar recortes en épocas de crisis, como indicó Francisco Pascual Vaquerizo (ELPA), distinguido en el apartado de Hábitat.
Caso especial, el del ganador del Tercer Sector, la Asociación Esclerosis Múltiple de Valladolid, representada por su presidente, Javier Tovar, y la secretaria, Elena Martínez, quien aseguró que su entidad tiene un “máster en dificultades”, motivo por el cual y ante toda la incertidumbre que les rodea, lo “fundamental” es el equipo y la actitud.
En su turno, Meléndez apuntó a los sacrificios que han de hacerse en pro de la viabilidad de la empresa, incluidas relaciones personales en algunos momentos, mientras que Soriano señaló que, cuando uno es empresario la adversidad está presente, por lo que hay que ser resiliente. “Te caes, te sacudes, te levantas y sigues luchando”, enfatizó.
JORNADA
La jornada comenzó a las 11.00 horas con una recepción y el saludo institucional del decano de la Facultad de Comercio de la UVa, José Antonio Salvador Insúa, quien aprovechó para, además de dar la enhorabuena a los ganadores, poner en valor la figura a la que se rinde homenaje: los empresarios, “los que obran el milagro de que esta sociedad funcione”.
Así, tras destacar que el ‘Certamen Empresario del Año’ es uno de los galardones más longevos de España de reconocimiento empresarial desde la universidad y que ya cuenta con cerca del 50 por ciento del PIB de Valladolid, pues cada año se van sumando más premiados al jurado, Salvador Insúa insistió en el nivel del tejido empresarial, lo que complica la elección de los finalistas.
Salvador Insúa redundó en la labor de los “generadores de trabajo, de renta, de riqueza”, que en no “pocas ocasiones” se miran con una perspectiva equivocada, pero que sin embargo son los trabajadores “que más horas hacen, los primeros en abrir la persiana y los encargados de bajarla al terminar”.
Concluido el saludo, todos los premiados procedieron a la presentación de sus respectivas mercantiles, así como su modelo de negocio, historia y planes de futuro, antes de impartir una conferencia en la Sala de Junta de la Facultad de Comercio de Valladolid que ha estado llena de alumnos de la propia Facultad.
