El facsímil del Beato de Valcavado se incorpora al Centro de Interpretación de Tábara
El Centro de interpretación de los Beatos de Tábara ha crecido con la incorporación de un beato más para su fondo, el Beato de Valcavado. El alcalde de la localidad, Antonio Juárez, fue el encargado de recibir a la puerta del antiguo monasterio de San Salvador, que se conoce popularmente como la Torre, al Rector de la Universidad de Valladolid, Antonio Largo, y la Vicerrectora de Comunicación y Extensión Universitaria, Carmen Vaquero, que iban a ser testigos de la incorporación del facsímil al fondo que ya acoge el Centro de interpretación de los Beatos de Tábara.
El Beato de Valcavado, considerado como uno de los códices mejor conservados, fue mandado componer por Sempronío, abad del monasterio de Valcavado, situado en las proximidades de Saldaña (Palencia) en el año 970 de J.C. Lo copió un monje llamado Oveco, que trabajó con gran diligencia, pues llevó a cabo su tarea en solo 92 días. Hasta el siglo XVI permaneció en la iglesia de Valcavado para luego viajar a León, donde es cotejado con el beato de Fernando I y Sancha, a Toledo, a Madrid y, finalmente, al colegio de San Ambrosio de la Compañía de Jesús de Valladolid, en donde permanece hasta la expulsión de los jesuitas en 1767. Pasó entonces a fomar parte de la Biblioteca de la Universidad de Valladolid, y a mediados del XIX, al incorporarse también a la Universidad el Colegio Santa Cruz, se integró en los fondos propios de la famosa biblioteca del Colegio.
El facsímil del Beato de Valcavado es coetáneo de nuestro beato de Tábara, ambos concluidos en el año 970.


